El seleccionado argentino de básquetbol, máximo favorito a quedarse con el título, arrancó su participación en la segunda etapa del Preolímpico, enfrentando a Canadá, en el partido del tercer turno de la jornada que se jugó en el Polideportivo Islas Malvinas.

En su camino hacia los Juegos Londres 2012, el equipo de Julio Lamas asumió con seriedad otro compromiso y venció claramente por 79-53 a los de Norteamérica.

Tal como se esperaba, el quinteto albiceleste culminó primero en la Zona B, con cuatro triunfos en igual cantidad de presentaciones.

Esos éxitos ante Paraguay (84-52), Uruguay (86-51), Puerto Rico (81-74) y Panamá (90-71) le permitieron a la llamada “Generación Dorada” del básquetbol local arrancar este segundo tramo de la competencia con el puntaje de arrastre ideal (3 unidades), para quedar por encima de todos los demás.

Con este triunfo ante Canadá entonces la diferencia en el liderazgo se mantiene.

“Sube el nivel de exigencia. Podemos perder uno o hasta dos partidos, pero jamás el encuentro clave del sábado”, destacó el técnico Lamas en la previa de este lunes, para reflejar la gravitación que alcanza el eventual compromiso de semifinales, aquel que decidirá la clasificación a la cita olímpica.

Es que los dos finalistas del 9no. Preolímpico obtendrán sus cupos directos para Londres 2012. Y la Argentina tiene en mente ese único objetivo.

En lo que va del certamen, el equipo desempolvó, de a ratos, esos atributos que lo llevaron a la máxima consideración mundial. Tal circunstancia ocurrió también en este cotejo ante Canadá.

La jerarquía individual de varios de sus intérpretes (Luis Scola, Emanuel Ginóbili, Carlos Delfino, Andrés Nocioni), un aceitado funcionamiento colectivo y una sólida defensa le posibilitaron maniatar a todos sus rivales, más allá de transitorios sofocones en los encuentros con Puerto Rico y Panamá, por citar los dos únicos casos.

El rival de este lunes, Canadá, propone un juego basado, principalmente, en la intensidad en defensa. El equipo de Leo Rautins exhibió vaivenes en la etapa inaugural del certamen, en donde le ganó con lo justo a República Dominicana (73-72), pero, por ejemplo, cayó ampliamente con Brasil (57-69). Así se mostró también ante la Argentina.

Corrió el partido de atrás en el marcador desde el primer minuto, pero también tuvo sus ráfagas de buen juego que lo acercaron a diez puntos de la albiceleste en algunos tramos del partido; una diferencia que siempre pone en juego al equipo perdedor.

Así las cosas, esa característica del equipo canadiense, que sufre por la falta de regularidad, fue también el principal déficit que ostentó para no poder hacerle partido a la Argentina y que ponen en duda su posibilidad de obtener, aunque más no fuere las plazas que acreditan al repechaje (del tercero al quinto).

Con ese análisis previo, Argentina no debía transitar inconvenientes para abrazarse a otra victoria y así, tal cual se prevía, logró otro paso satisfactorio camino a Londres 2012.

Fuente: El Atlántico