La sociedad actual obliga, tanto a adultos como a niños, a llevar una vida de mucha exigencia, marcada por un ritmo en el que las obligaciones cotidianas, las presiones laborales, la falta de dinero, la falta de espacios y tiempo libres para la recreación, se han convertido en el modo de vida habitual especialmente en las ciudades.

Los chicos también tienen sus rutinas, sus exigencias escolares. Deben acomodarse permanentemente a los horarios familiares, según el trabajo de los padres. En muchos casos tienen actividades extraescolares, con las que ocupan su tiempo hasta que sea la hora en que todos vuelven a casa. Por eso, tanto adultos como niños, necesitan dedicar un tiempo a la recreación, al esparcimiento, al descanso. Necesitan ser libres en el tiempo, necesitan encontrarse con el juego, aquella esencia del ser humano.

A través de la convivencia con otros se puede trabajar con los chicos distintos valores como el respeto, la solidaridad, la cooperación, la aceptación del otro. Una buena propuesta de recreación debería tener en cuenta estos aspectos. Tanto las actividades recreativas como las deportivas grupales son importantes y necesarias en la vida de los chicos.

Finalmente, otros consejos para los padres que buscan una colonia es acercarse al director de la misma, conocer cómo están organizados los grupos, cuántos profesores hay a cargo de los grupos. Una vez inscripto en la colonia, es importante que los padres no se desentiendan y se acerquen al predio donde se desarrollan las actividades, conozcan a los profesores, participen de alguna actividad. Y por supuesto es importante conversar cada día con los chicos para conocer como se sienten y cómo la están pasando.