Martes 7 de Abril de 2015 12:00
Claves para que los chicos usen Internet sin riesgo
Los expertos en seguridad aseguran que la educación y el monitoreo es fundamental para que los pequeños de la casa usen sus dispositivos sin peligro.
Los chicos otra vez tienen tareas para hacer, trabajos que presentar y vuelven a chatear y a escribirse con sus compañeros del colegio. Los expertos aseguran que no tiene sentido prohibir el acceso de los más pequeños a la tecnología.
En el colegio, en la casa de amigos o hasta en la de algún familiar podrán acceder, por otro lado, es una herramienta de aprendizaje muy útil si se utiliza adecuadamente. Por eso a muchos padres los aqueja la misma pregunta: “¿cómo puedo hacer para que mis hijos no estén en peligro mientras navegan en Internet?”
Los expertos destacan que lo más importante es la educación. “Los padres deben ser claros con sus hijos y decirles que tienen que tener cuidado con la información que comparten y que deben conocer a la persona con la que chatean o conversan. Además los padres deben conocer qué información consumen los chicos, qué páginas de Internet frecuentan, qué contenido descargan y de qué lugares, porque sin saberlo pueden instalar un software espía que toma información valiosa de la computadora”, recomienda Daniel Rojas, gerente de marketing para América Latina y especialista en seguridad de Symantec.
Fabio Assolini, analista senior de seguridad en Kaspersky Lab, agrega que si los padres cuidan a sus hijos cuando estos juegan en la calle, deben cuidarlos cuando navegan por el Internet: es, después de todo, una puerta hacia el inabarcable mundo digital.
Un estudio reciente de Chicos.net analiza las posturas que toman padres frente a la tecnología, según se comportan como guardaespaldas, sobreprotectores o espías de lo que hacen sus hijos online, y dónde lo hacen: en su cuarto (donde es más difícil la supervisión paterna) o en un área común, como la cocina o el comedor.
Entre los peligros que rondan en el ambiente virtual están la pornografía y la pedofilia, el contenido inapropiado, los virus, los trucos de phishing (sitios y aplicaciones que se hacen pasar por otras para capturar contraseñas y datos de tarjetas), los troyanos y el ciberbullying o ciberacoso. “Lo que más le preocupa a los padres es el acceso fácil al contenido para adultos que surge por medio de indagaciones en motores de búsquedas. Muchas veces ese contenido aparece como resultado en búsquedas inocentes con palabras que pueden tener un doble sentido”, comenta Assolini.
Lo más importante es generar un espacio entre padres e hijos para hablar de las amenazas y los hábitos en Internet.